Las y los estudiantes en este caso, fueron más de sesenta docentes y académicos/as, provenientes de Centros de Formación Técnica (CFT), Institutos Profesionales (IP), Universidades y establecimientos de Educación Media Técnico Profesional (EMTP) a lo largo del país y de las más diversas carreras / especialidades, constó de seis módulos de proceso formativo para que ellos y ellas adquirieran las habilidades y conocimientos necesarios y, a su vez, eduquen en un futuro en los temas de economía social y solidaria, cooperativas, emprendimiento social y escolar, entre otros, a sus estudiantes.

De manera inédita, el último módulo denominado “Desarrollo organizacional y modelos asociativos de negocios” estuvo a cargo de Ana Aguirre, actual representante del Comité Ejecutivo de Juventud y Presidenta de la Red Global de Juventud de la Alianza Cooperativa Internacional (ACI), quien realizó las clases y talleres desde España; así también, consideramos relevante mencionar la participación de Pío Aguirre y Javier Sotil, quienes en la última sesión del Diplomado compartieron con el estudiantado sus experiencias más memorables en relación a su rol como destacados líderes cooperativos en la Corporación Mondragón, uno de los máximos referentes a nivel mundial en el ámbito cooperativo.

Desde el Área de Docencia y Capacitación agradecemos a la Fundación para la Innovación Agraria por confiar en nosotros la capacitación de este valioso y diverso grupo de académicos/as y docentes, a Florida Universitaria por su importante colaboración desde lo académico, así también a las y los profesores que acompañaron el aprendizaje de cada estudiante, y al estudiantado por mostrar constante motivación y dedicación al curso, dando como resultado que cincuenta y cinco de ellos y ellas obtuvo la certificación.

Creemos firmemente que la misión encomendada de formar en el modelo cooperativo a las y los participantes del programa para que puedan educar a otros y otras en tales conocimientos, fue una enriquecedora experiencia y esperamos haber cumplido con las expectativas de cada uno/a; ahora el desafío queda en sus manos para hacer de sus espacios educacionales más solidarios, colaborativos y justos, promoviendo que sus propios estudiantes aprendan, innoven y emprendan colectivamente bajo los principios y valores del modelo cooperativo.